Fisioterapia uroginecológica y obstétrica a domicilio en Salamanca

Porque tu suelo pélvico no tiene que aguantárselo todo. Ni tú tampoco.

Esto te interesa si…

  • Estás embarazada y quieres prepararte para el parto como toca, no con vídeos random de YouTube.
  • Estás en posparto y sientes que “todo se ha recolocado raro”, pero no sabes por dónde empezar.
  • Notas escapes de pis al toser, reír o correr (y te han dicho que es “normal”, pero tú sabes que no).
  • Sientes presión, molestias o “algo raro ahí abajo” y no sabes si es muscular, hormonal o del espacio exterior.
  • Te da pereza o vergüenza ir a una clínica, pero no quieres dejarlo pasar más.

¿Qué hacemos?

Somos fisioterapeuta y vamos a tu casa para ayudarte con:

  • Valoración y tratamiento del suelo pélvico.
  • Preparación al parto (movilidad, postura, respiración, pujo, etc.).
  • Recuperación postparto (diástasis, cicatrices, abdomen, periné…).
  • Incontinencias urinarias (esas que “le pasan a todas”… y no deberían).
  • Dolor en relaciones sexuales, molestias pélvicas y/o abdominales.
  • Ejercicios, liberación miofascial, educación, técnicas manuales y más. Todo adaptado a ti.

“Me da vergüenza que alguien me mire ‘eso’…”

Lo entendemos, de verdad. Estamos hablando de una zona muy íntima, muy olvidada y muy tabú. Y si encima no te encuentras bien, o te notas “rara” desde el embarazo o el parto, pues apaga y vámonos.
Pero déjanos decirte que nosotros no venimos a juzgarte, ni estamos aquí para opinar sobre tu cuerpo. Nuestro trabajo es ayudarte a sentirte mejor. Sin presión. Sin “venga, relájate” ni miradas raras.
Esto no es una revisión ginecológica. Es fisioterapia. Y no siempre hay que hacer valoración interna. De hecho, muchas veces con observar, palpar externamente o simplemente escucharte, ya sabemos por dónde podemos empezar a trabajar.

Y si llega el momento de hacer una valoración más completa: explicamos todo antes, tú nos das el consentimiento y, si no estás cómoda, todo se adapta o se deja. Siempre. Lo mínimo que te mereces respeto y cuidado sin vergüenzas.

💞 Volver a disfrutar del sexo sin dolor (y sin fingir que todo va bien)

A ver… nadie te lo cuenta, pero pasa. Después del parto, o incluso sin haberlo pasado, tener relaciones puede doler. Y no un poquito. A veces quema, tira, molesta, incomoda o directamente te hace evitar el momento.
Y claro, ahí empieza el bucle: no lo cuentas porque te da vergüenza; tu pareja no sabe si insistir o no; tú finges que “todo bien” o pones excusas. Y al final lo que era placer se convierte en presión.
Pero escucha esto: el sexo no debe doler. El dolor no es normal. Y no, no eres rara. Ni estás sola. Muchas mujeres viven esto en silencio. Y no hace falta que sigas así.
La fisioterapia de suelo pélvico puede ayudarte a: entender por qué pasa, tratar el tejido que está tenso, sensible o bloqueado; mejorar la lubricación, la movilidad y la respuesta del cuerpo; recuperar el placer, la confianza y las ganas

En tu casa. A tu ritmo. Sin incomodidades. Y sin juicios.

Cuidarte sin tener que salir de casa (ni organizar una misión imposible)quí

Cuidarte no debería ser una odisea. Pero lo es. Tienes que vestirte, arreglarte, dejar al bebé con alguien (si se puede), coger el coche, aparcar, sentarte en la sala de espera con cara de «todo bien», hacer la sesión y luego… volver a casa a seguir con el caos.
¿Resultado? Muchas mujeres no lo hacen. Porque simplemente no pueden. Y porque parece que para cuidarte tienes que tener tiempo, energía y ayuda externa.
Por eso este servicio existe. Nosotros vamos a ti. Tú no te mueves. En tu casa, con tu bebé al lado y con la ropa que te dé la gana. No tienes que estar perfecta. Ni ser la madre del año. Solo tienes que estar tú. Porque cuidarte no debería ser un lujo ni una heroicidad.

Reírte sin miedo a un “escape”. Saltar sin cruzar las piernas. Toser sin apretar.

Sí, hablamos de esas pérdidas de pis que llegan sin avisar. Cuando te ríes, cuando estornudas, cuando saltas, cuando coges peso … o simplemente cuando te pilla mal la vejiga.
Y empiezas con un “bueno, es poco”… Luego con un salvaslip “por si acaso”… Y al final terminas evitando cosas por miedo a que se te escape.
Y no, no es normal. Y no, no es por tener cierta edad. Y no, no te tienes que aguantar. Ese pis que se escapa no es una condena, sino un aviso de que tu suelo pélvico necesita atención. Con ejercicios específicos, respiración, control, trabajo profundo y constante, puedes volver a confiar en tu cuerpo.
Y todo eso, desde casa. Sin cruzar las piernas cada vez que estornudas.

¿Y si empiezas a cuidarte hoy?

Si has leído hasta aquí, ya sabes que esto no va solo de pérdidas de pis ni de pospartos mal gestionados. Va de ti. De cómo te sientes. De cómo quieres vivir tu cuerpo. Sin miedo, sin vergüenza y sin normalizar lo que no es normal.
Nosotros no te prometemos magia. Pero sí te prometemos escucharte, tratarte con respeto, hablarte claro y ayudarte desde donde estás. En tu casa. A tu ritmo. Sin juicio.
Y si tienes dudas, llámanos. Y si lo tienes claro, llámanos.

Contacto

henkoespacio@gmail.com

+34 659 57 09 58

Av. de Filiberto Villalobos, 80-82,
37007 Salamanca

Horarios

LUN-VIE: en horario de mañana y tarde

Síguenos